"Veritatis simplex oratio est"

Séneca

Sunday, April 29, 2007


Aysén: Sinopsis del Paraíso
Francisco de la Fuente V.

Aysén, allá a poco más de la mitad del siglo pasado llegue a esa región, tras un vuelo en un monomotor Otter de la Fach, íbamos mi hermana y mis padres para radicarnos en la zona. Luego de viajar unas horas interminables; bajo fuertes turbulencias, logramos aterrizar en Balmaceda nuestro lugar de destino. Un pueblo para mi una aldea para otros, que sólo es conocido por el otro Chile cuando entregan el tiempo después de los noticiarios de la televisión, nos recibió con una tempestad ventosa que obligó al personal de la base a ir en búsqueda del avión con un jeep, para llevarlo al hangar y así bajar a los pasajeros que venían revueltos con la carga que había cedido a su amarras. Tan terrible fue el viaje que mi madre sentenció a mi padre que ella regresaba al norte hasta que llegará el tren, de hecho este nunca llegó y mi madre tuvo que conformarse con volver en un avión que por su tamaño parecía tren.

Así nos adentramos en la tierras de la Región de Aysén, conocimos su generosa geografía, los asados de corderos al palo y su gente maravillosa, a sus primeros colonos los Peede, Echeveguren y los Fernández; los cuales de seguro han fallecido, quedando sus herederos que quizás hayan logrado mantener las tradiciones de sus ancestros. Han pasado tantos años de que recorríamos sus calles caminando sentados en el viento y tratando de mantener nuestros pies sobre la nieve para llegar a la escuela o al almacén "El Camello" de Omar Chible o "El Gran Calafate" de Carlos Asi, o quizás para gozar con nuestros juegos infantiles a bordo de nuestros apreciados trineos de autoconstrucción.

Hoy Aysén esta herido por la naturaleza, no me cabe duda que su gente se levantará, pues ellos están acostumbrados a vivir la adversidad, cuando no es el fuego en sus bosques, es el aire por los suspiros de un volcán, o la tierra que se mueve acompañada por el agua que besa sus costas. La ciudad de Puerto Aysén su capital ha sido el centro de la catástrofe, las imágenes de su puente colgante meciéndose fuertemente, hacen olvidar la historia mítica de esos dos aviadores que apostaron que pasaban en pleno vuelo con sus aviones por debajo de su estructura. Quizás mirando sus calles también olvidemos ese otro dicho de que es esta una ciudad en que llueve de “abajo párriba”

Antes de contruirse la carretera Austral para llegar a la zona a través de Chile había sólo dos alternativas: el viaje aéreo o marítimo. El primero podía partir en Santiago con escalas en Puerto Montt con destinos a Balmaceda o Coyhaique; en algunos casos excepcionales se hacía escalas en otros villorrios como Palena, Ñiriguao, La Tapera. La segunda alternativa era embarcarse en Angelmó pasando por Puyuhuapi y Puerto Cisnes llegando al embarcadero de Chacabuco puerta de entrada a la ciudad de Puerto Aysén. Luego por tierra se accedía por un camino de ensueño con su salto de agua a la ciudad de Coyhaique, de aquí pasando por Valle Simpson hasta Vista Hermosa donde el camino se bifurcaba para ir a Balmaceda o Puerto Ingeniero Ibáñez al lado del lago General Carrera.

Cascadas vigorozas, ríos de aguas translúcidas y torrentosas, lagos coloreados por la mano del Hacedor, ventisqueros cristalinos, cielos azulinos en que las nubes nacen y se mueren ante nuestros ojos, arrieros en sus grupas fuertemente abrigados con sus boinas, mantas, pantoloneras de chiporro, listos para apearse en cualquier momento para servirse un matecito amargo al borde del camino, dejando a sus ovinos al cuidado de sus perros ovejeros, toda una muestra del paraíso que Dios dejo para que el hombre supiera a través de las generaciones lo que perdió.

Quizás más temprano que tarde podré volver a recorrer sus caminos, a saltar sus árboles caídos y sentarme en la tierra para degustar de sus campos directamente las frutillas silvestres…. Quizás …. Más ahora Ayseninos os aliento a tener el ánimo de seguir viviendo en esos divinos parajes mientras nosotros sobrevivimos en los nuestros.

1 comment:

Anonymous said...

La region de Aysén de clima infranquiable, tal vez hace diez años que estuve en ese lugar, recuerdo mi nariz helada, la nieve copiosa, y mis dedos colgando como estalactitas sobre un pedazo de metal, que gran mezcla de tempestad y voluntad.
Cohyaique, Río simpson, las Bandurrias, tbn espero volver alguna vez.
recreemos la vista mientras tanto
http://www.coyhaique.cl/coyhaique_ciudad_amigable/album/slides/rio%20simpson.html