"Veritatis simplex oratio est"

Séneca

Sunday, July 20, 2025

Lanzamiento Libro: Los Farmacéuticos son los Mejores

 Invitado a ser parte de la presentación del nuevo libro: "Los farmacéuticos son los mejores" del colega QF. Mauricio Huberman Rodríguez, en la sede del Colegio de Químicos Farmacéuticos y Bioquímico de Chile (A.G.), ubicado en la antigua casona de la calle Merced en Santiago. 

El evento se dio en un espacio de camaradería fraternal entre quienes acompañaron y dieron un realce muy emotivo, sobre todo porque el programa contempló la locución y presentación artística de los propios hijos de Mauricio, lo que por supuesto lleno de emotividad al autor, su familia y los concurrentes.

Inicie mi exposición agradeciendo la invitación al lanzamiento del libro, la cual me daba una ocasión de sentirme muy honrado en participar, a su vez me entregaba la oportunidad de manifestar públicamente un agradecimiento a Mauricio, por su fraternidad profesional hacia mi persona considerando que en los inicios de nuestra actividad gremial fuimos partes contrarias en las coyunturas especiales, que involucraban acciones que afectarían el presente y futuro en el desarrollo del quehacer de las farmacias comunitarias, especialmente por las tendencias  que se propiciaban en esos días hacia la concentración estratégicas de ellas, que en definitiva darían estructuras a lo que actualmente conocemos del retail farmacéutico.

Es aquí, donde aparece la persona y profesional que ha demostrado ser nuestro colega Mauricio Huberman, lo cual sin dudas se ve plenamente reflejado en el libro que hoy nos entregas a las generaciones que lo hemos acompañado, como a las futuras que deberían conocer a través de este testimonio escrito, que es posible hacer en nuestro entorno profesionales farmacéuticos mejores, siguiendo su ejemplo valórico, como muy bien lo expreso uno de sus hijos.

Seguí mi exposición haciendo una introducción, en la cual mencioné que la primera impresión en que me detuve fue el título de la obra, atendiendo a su bella osadía que tuvo al atreverse a expresar que "los farmacéuticos son los mejores". No dudo de que esto sea así, es más encuentro genial que Mauricio lo afirme con la autoriadad que los años de ejercicio profesional y gremial le han entregado.

Proseguí clasificando el libro como una obra autobiográficas que se sustentaba en crónicas que partían en los inicios estudiantiles, en lo cual no faltaban las actividades deportivas y proezas de aquel muchacho que con el tiempo ingresaría a la universidad para seguir la carrera farmacéutica, teniendo presente que por razones familiares estás no le eran ajenas. 

En la lectura del libro identifique al menos dos palabras que conceptualmente me permitieron reconocer un hilo conductor, estás eran: Crisis y Paradigmas1. Quién podría dudar que en los últimos 50 años hemos navegado por mundos que mostraron sus crisis y cambios de paradigmas que influyeron directamente en el quehacer de los profesionales farmacéuticos y en el marco normativo en la dispensación de los medicamentos.  

En su trayectoria Mauricio demostró que podía liderar navegando entre estás crisis y cambios de paradigmas, compartiendo o mayormente el timón, buscando aguas propicias y vientos favorables que pusieran en su horizonte los mejores puertos para contribuir a que los farmacéuticos fueran los mejores. 

La presentación del libro de nuestro colega es sólo un alto en su camino, pues como el mismo lo manifestó posteriormente al agradecer a los presentes, aún encuentra que le resta la voluntad suficiente para continuar su actividad laboral y apoyo a quienes asuman responsabilidades gremiales.

Mis palabras al cierre fueron para recomendar que este libro llegue a las bibliotecas de las universidades del país que dictan la carrera de química y farmacia, considerando que las nuevas generaciones (como anteriores que no se integran, encuentres en sus páginas la cantidad y diversidad de acciones que se realizan entorno a nuestro colegio profesional, identificando los benefecios que actualmente se tienen gracia a la perseverancia, paciencia de un colega con la dedicación solidaria que nos ha entregado Mauricio Huberman Rodríguez.

Finalizo expresando mi gratitud a Mauricio, y que lo que uno quisiera ragalarle a nuestra amada profesión que ojalá tengamos muchos Maruricio Huberman por siempre.


Bibliografía

- Huberma R, Mauricio. 2025. Los farmacéuticos son los mejores. Colegio de Químico Farmacéuticos y Bioquímicos de Chile A.G.

- Llamazares, Ana María. 2011. Del reloj a la flor de loto. 1a edición Editorial Del Nuevo Extremo. Buenos Aires. Argentina

- Referencia a la frase atribuida a Séneca: "Para que desean vientos favorable de popa, sino saben para dónde de van"



Tuesday, July 15, 2025

Adiós Sonia: pasajera inolvidable

 Hace unos días ha partido una amiga y compañera de viaje por muchos lustros, reconociendo en esto, que hemos perdido una pasajera con la cual compartimos muchos viajes y tertulias, a este y al otro lado del gran charco del océano pacífico. Nos ha dejado un vacío grande, que intentamos no llenarlo de tristeza, sino de acomodar las infinitas alegrías que vivimos en cada una de las miles de millas que recorrimos a lo largo y ancho de este mundo.

Sabemos que la muerte es algo seguro e inevitable como nos lo hizo saber el sacerdote durante el responso  de  nuestra amiga Sonia.  Como nos recuerda el poeta Armando Uribe:
 
“La muerte despiadada no hace excepciones: uno por uno nos recoge del suelo en que vagamos como hormigones negros –cuando menos pensamos, pero en nada pensamos –cuando nos llega el turno, despiadada nos coge con sus pinzas de fierro, nos traslada el lugar de nuestro entierro”.

Una larga caravana recorrió la distancia entre el templo y el camposanto, que bajo un sol que no alcanzaba a calmar la fría tarde en la cual entregamos resignados el cuerpo ante esta verdad que como hecho inevitable, solo nos quedaba muy a nuestro pesar aceptar. Podremos hacernos preguntas del por qué la partida llegó tan inoportunamente, cuando habían tantos proyectos que han quedado abandonados. Nos cobijamos en la esperanza que su alma a dejado su cuerpo para enfrentarse a la verdad e intentamos expresar nuestra esperanza de eternidad, sin olvidar que hemos nacido para morir, donde nuestra mayor proeza es alcanzar una duración que haya permitido momentos de felicidad.
 
Se ha ido nuestra “Chef” dejando atrás a quienes seremos sus eternos deudos de la diversidad de menús que se producían  en su caótica cocina. No somos dignos discípulos para intentar emular las proporciones de las innumerables especias que sus manos vertían sobre sus sabrosas comidas. ¡Adiós! “Chef” y gracias por compartir tu talento solidario  de la buena mesa.

Aceptamos poner fin a esta tristeza porque la muerte es unas certeza que más temprano que tarde compartiremos, debemos ser conscientes de ello, y por ello mismo debemos darnos el tiempo y espacio para vivir. Esta es la conformidad que nos deja la experiencia de convivir con Sonia, pues vivimos momentos inolvidables en cada uno de nuestros viajes por el mundo, en los reencuentros fraternales celebrando cada oportunidad que el calendario dejaba un espacio de ocio o la celebración de una fecha especial.

Por cierto, no tenemos repuesta a las preguntas que justifiquen la partida de quienes amamos, aún así nos llenamos de esperanza que hay otra vida, que en esta nos has dejado la gracia y amor, que sin dudas nos seguirás acompañando, porque nuestras memorias no te olvidarán.  Adiós Sonia , descansa en paz.



In memoriam de Sonia Mardones 11 julio 2025

Tuesday, July 01, 2025

 Mi madre y los libros

Por Francisco de la Fuente Vásquez

Hoy primero de julio mi madre habría cumplido 102 años, los mismo que cumplió mi padre para luego partir y dejar atrás su cuerpo material, mi madre lo hizo hace poco más de tres años. Eran profundamente católicos por cuanto no me cabe ninguna duda que creían en que se reencontrarían nuevamente. 

Hace unos días atrás leía el libro que escribió Javier Cercas sobre el Papa Francisco, una crónica que lleva por nombre: "El loco de Dios en el fin del mundo",  mientras lo acompañaba en unos de sus viajes a la periferia de los mundos precarios de justicia social, que tanto le agradaban a Bergoglio.

El escritor Javier Cercas, quien ha reconocido ser un ateo, busca mediante este acto preguntarle al papa si el cree en la posibilidad de volver a reencontrarnos con aquellos seres amados que se han marchado, todo esto, para darle conformidad a su madre de que volverá a estar junto al amor de su vida al final de los tiempos.

Por estos días visitando una librería me preguntaba sobre lo que los libros eran para mi, y debí reconocer que con los años he perdido a la gran mayoría de mis amigas y amigos, pues en su tiempo no valoré que en gran números ellos eran bastante mayores que yo. Así que como ley de la vida ellos se han ido marchando dejando espacios vacios de tertulias y encuentros fraternos, con lo cual he perdido la posibilidad de compartir mis reflexiones y escuchar sus acuerdos y desacuerdos cobijado en aquellos diálogos interminables que construían más dudas que certezas. Quizás este mismo hecho era el incentivo para volver a reencotrarnos nuevamente para revivir esta serie de tertulias. Si, definitivamente la soledad se me aparece como una brisa que amenaza abrazar mi camino.

Bueno, es así como los libros han ido construyendo un muro que intenta con éxito frenar aquella brisa de soledad, y es aqui el instante en que debo agradecer a mi madre haber guiado mis primeros acercamientos a los libros. Allá lejos en el tiempo hubo en la patagonia Balmacedina un aviador, llamado Jorge Isler que tenía una treintena de libros - o quizás menos - que prestaba a mi madre la cual terminaba compartiéndolos conmigo. Así mis primeros autores eran principalmente hispanoamericanos, y muy escasos europeos y norteamericanos, entre los cuales no puedo dejar de mencionar a Frank Yerby, el cual me entregó el puntapié inicial para los grandes novelistas de best-Sellers que vendrías posteriormente cono Irving Wallace, Ken Follet, Frederick Forsyth, Noah Gordon, Stephen King y Harlan Coben entre otros.

Gracias mamá, los libros siguen aquí.