"Veritatis simplex oratio est"

Séneca

Sunday, August 08, 2010

Avatares de los pos

Cuando pienso en el mundo que me ha tocado vivir no puedo desapegarme del prefijo “pos”, lo cual marca una referencia a algo que fue y se resiste a morir, o en su defecto muestra una arista de lo que ya no se quiere ser o no es, en pocas palabras esta es una época como dice Paul Watzlawick , que podría definirse como el sentido del sinsentido.

De hecho si comenzamos por considerar el término “posindustrial” nos encontramos que luego de un somero análisis, las promesas de la ciencia y la tecnología no reflejan paralelamente el mejoramiento de las oportunidades y calidad de vida de todos aquellos que laboran en la producción de bienes y servicios.

Para ejemplificar esta afirmación recurro al ejemplo de lo que esta sucediendo en la España de hoy, la cual marca una cesantía por más de 20 puntos porcentuales, lo cual a todas luces es inaceptable si consideramos que hemos ingresado al siglo XXI, y que tengamos personas que habiendo alcanzado incluso altos estudios superiores, tenga como única oportunidad de trabajo la prestación de servicios menores como “obreros de retail”.

Sinceramente veo con dificultad que las promesas posindustriales de las nuevas tecnologías aplicadas a la producción, puedan dar una solución al input total de trabajo que esta generando nuestro mundo, sino se incentiva una mirada a la economía desde la perspectiva del respeto de la dignidad humana .

Sólo si tenemos en cuenta que las grandes manufactureras y la gran minería, podrían considerar el hecho de reducir su actual número de trabajadores, sin que ello implicará una disminución de los niveles de producción. Por otra parte, la disminución de las horas de trabajo semanal que se inicio a lo largo del siglo XX, está provocando que exista una gran masa de personas que disponen de mucho tiempo ocioso, en los que lamentablemente no se promueven los espacios y oportunidades para desarrollar las potencialidades personales y creativas

Por otro lado esta la llamada posmodernidad, un término bastante poco afortunado pues da por hecho que sabemos lo que es la modernidad, para a partir de aquí definir el concepto de posmodernidad como aquello que no es, en estricto rigor si acudimos a la opinión de Vattimo: lo posmoderno no es “lo contrario” de lo moderno, sino su rebasamiento.

En esta perspectiva tiendo a pensar que con razón a Francis Fukuyama no le quedo otra alternativa que ponerle fin a la historia, así el mundo ha comenzado a transitar por la poshistoria, la cual se focaliza específicamente en el acontecer presente, ya que es la misma modernidad que se autoviste invirtiendo sus aspectos culturales que la identifican.

A su vez hay que recordar que por culpa de Michel Foucault, Inmanuel Kant se ve involucrado en la definición de un punto de inflexión en el cual se iniciaría la modernidad, a través del acto de toma de conciencia histórica de la época en que vivió. Esto indudablemente se nos aparece como la falacia de que todos los seres humanos pensantes anteriores a Kant, no hubiesen estado conciente de la historicidad de su época. Esta barbaridad nos conduciría a su vez que otros pensadores posteriores como Marx y Nietzsche, no hubieran promovido sus propuestas de una realidad futura conocidas como el comunismo y el superhombre respectivamente.

Parece ser más aconsejable seguir la opinión de Jurgen Habermas respecto a lo moderno, entendiéndolo como aquello que tiende a dar expresión objetiva a la actualidad espontáneamente renovada del espíritu de una época, este es un fenómeno que se ha repetido ineluctablemente en Europa, cada vez que se forma la conciencia de una nueva época mediante la redefinición de su relación con lo antiguo.

Si recorremos la historia del ser humano nos encontramos que uno de estos fenómenos que ha marcado por siglos el quehacer social, es la llamada revolución neolítica que impuso la rúbrica en la cual la vida humana quedo sujeta a la lógica de la línea genealógica , prevaleciendo a través de la historia la obsesión humana por el parentesco y la propiedad. Estas ideas desarrolladas muy bien por Peter Sloterdijk demuestran que los hombres del neolítico con su impuesto autocerco se condenaron al pasado y a sus muertos, al darle preponderancia al parentesco y la territorialidad por sobre la simpatía y la libertad espacial.

Es posible que un gran acontecimiento se este incubando en la humanidad actual y este referido a la pérdida definitiva de la era universal dominada por el pensamiento genealógico. Quizás un tipo de pos hombres en una actitud desertora se sientan ajeno al mundo y que busquen ir más allá de él, aunque no hay que desconocer que los seres humanos rebeldes son la excepción pues el miedo es un impedimento antropológico recurrente y que les limita dar este salto definitivo.

Confieso que no tengo la intencionalidad de alargar este comentario, por ello finalizo reflexionando, que en el mundo de las ideas el prefijo pos es una explicación más, que busca calificar el desarrollo histórico de la humanidad como un proceso discontinuo y estático, en lo personal seguiré mi camino, utilizando la intuición y la razón como instrumentos que me ayuden a explicar el sentido de este mundo, teniendo en cuenta una perspectiva esperanzadora ciega de esta vida que evoluciona creativamente.

No comments: