"Veritatis simplex oratio est"

Séneca

Monday, February 07, 2011

Nietzsche para todo tiempo.

Es bastante común que algunas personas busquen un acercamiento al quehacer filosófico a través de las lecturas de las obras de Nietzsche, debo confesaros que no he sido en lo personal una excepción. Sin embargo, en el camino de la madurez aunque he releído sus obras al final me he quedado con una de ellas porque estimo que es la más representativa del real aporte al pensar filosófico por parte de este autor.

Es más en ello evito todo aspecto sistematizado en la productividad de Nietzsche, sobre su visión egoísta, sus ataques a la moral y otros, pues a mi manera de ver lo mejor de este autor es aquello que no es factible de sistematizar. Si ustedes me lo permiten él se mueve en al menos dos ideas, que no son tan novedosas, una la del superhombre; de la cual dejo más confusiones que claridad, y la otra lo de los ciclos lo cual para algunos pensadores nos lleva incluso a la existencia de cierta contradicción entre ambas, entendiendo que una lleva implícito el progreso y la otra con un sesgo de repetitividad que se opone a la innovación.

No olvidéis que por un lado exacerba el dominio y el poder de los superiores, para al mismo tiempo reconocer el triunfo de la moral de los inferiores, es decir la derrota de los fuertes por los débiles, decididamente esto no puede ser lo más importante de lo que Nietzsche nos ha dejado para la posteridad, y por supuesto que la razón de su relectura no pueden ir por este derrotero, al menos en mi opinión personal.

El Nietzsche que me atrae es aquel que logra exaltar mi espíritu, removerlo hacia la inquietud y la ansiedad de aventurar nuevas respuestas a las interrogantes filosóficas de mi tiempo, ese es el Nietzsche que releo no sus planteamientos sobre el poder, el dominio de una clases de hombres por otro, ni la presencia de ciclos históricos, nada de esto es comparable a releer sus aforismos cerrando los ojos por un instante para dar cabida a un juego lúdico de los sentimiento que Nietzsche busca dejar en ti.

Me pregunto cuantos padres hoy día recomendarían a sus hijos la lectura de este autor, en particular aquellos que son religiosos, o más aún cercanos al cristianismo, no tengo la respuesta pero mi hipótesis es que no deben haber muchos si es que los hay. Es claro que los libros no son responsables de la utilización que los lectores hagan de ello, leer El Capital no me hace comunista. En términos digestivos el comer mariscos no te hace una maquina de potencia sexual; por más que insistas, el comer carne de vacuno no te provee de ninguna característica de la sacrificada res que ha llegado a tu plato. En pocas palabras el leer a Nietzsche no te convertirá en un antirreligioso de algún orden.

Concuerdo con que a Nietzsche hay que leerlo en sus fuentes alguna vez, y por sobre todo antes de acercarse al resumen de sus obras, porque si hacéis esto solo conoceréis lo peor de su pensamiento, pues tiene presente que si los más no lo leen y los que lo leen a través de este camino conocen lo que menos vale de él, y agregar por consiguiente que es esta la fuente de la mayoría de las citas que encontramos en sociedad.

Quizás ustedes puedan pensar que he rehuido explicar el porque no es de mi agrado la filosofía de Nietzsche en lo que es posible sistematizar; huelga si es menester podemos hacerlo, la razón es que he preferido no extenderme en lo que es el Nietzsche conocido por popularidad, porque el objetivo de este comentario es señalar el porque siento que es recomendable releer su obra la “Gaya Ciencia” en particular, para así encontrar el Nietzsche que es para todo tiempo.

2 comments:

Anonymous said...

Pancho, te habías tardado mucho en darle una pasadita al genio de Nietzsche, voy ir por tu consejo a leer la gaya ciencia, pero antes me duele que hayas hechado al cajón de desperdicios una obra como el origen de la tragedia, por que? ten en cuenta que ni siquiera reclamo por Zaratustra ...Bye

Francisco de la Fuente Vásquez said...

Me imagino que a la obra de Nietzsche que te refieres es al "El Nacimiento de la Tragedia", en la cual se simbolizan por el filósofo tres principios, donde el dionisíaco es encauzado por el apolíneo lo cual da un aspecto positivo para la civilización. Sin embargo aparece uno negativo que es el principio socrático.
No olvidéis que para Nietzsche la vida es hostil y agresiva, yendo uno contra los otros.
Entretenido pero desde la perspectiva filosófica no lo siento un aporte para darle sentido a la existencia humana.
Lo siento .....Que estés bien