Desde mi Botica de las humanidades:

2014.001

Esta mañana mientras releía los Pensamientos  de Pascal encontré antecedentes para responder de alguna manera a la interrogante, que plantea el creciente frenesí del consumismo actual, pero especialmente identifiqué elementos que me ayudan a explicarme  aquel sentimiento de aburrimiento que manifiestan jóvenes y no tan jóvenes en sus quehaceres mundanos. Comparto la lectura de este pensamiento de Blas Pascal:

“Un hombre puede pasar la vida entera sin aburrirse, apenas apostando todos los días una suma modesta. Denle, cada mañana, el dinero que podía ganar en un día, con la condición de que no debe jugarlo: ¡lo convertirán en un desdichado! Pueden decir que sólo busca el entretenimiento del juego, no la ganancia. Muy bien, háganlo jugar porque sí. No habrá excitación alguna .¡ se morirá de aburrimiento!"1

Sin dudas esto es muy típico en las personas que sufren de ludopatía, aunque podemos inferir que este tipo de comportamiento también lo encontramos en otros menesteres de la vida. Pascal resume esta idea cuando nos dice que: “La distracción es lo único que nos consuela de nuestras miserias, aunque en sí misma es la mayor de nuestras miserias”2

1.  Pascal, Blaise. Pensamientos. 1ª ed. España: Ediciones Ibéricas: La crítica literaria. 2011

2. Ibid.